
A quien corresponda:
Hoy decidí hacer mis 40 días en el desierto esperando encontrar algo. Dejé mis deudas pagadas; regalé mis mascotas; solo tengo un reclamo: me perdí yo mismo. Por eso me alejo para ser amigo de piedras, polvo… de la soledad. Dicen que la arena es profética, en cada granito se esconde galaxia, un secreto, y busco uno para mi corazón. No sé si volveré hecho silencio, carne, tormenta de arena o con la calma de una roca, pero volveré siendo yo.
Desde Timna, el 08 de enero de 1977.